El gran día de Victoria. Escrita por Paula M.

El gran día de victoria

   Hoy el día era precioso y Victoria decidió ir a la playa. Cogió su gran bolsa y metió dentro la comida, su bonito bañador de lunares, su libro favorito y un flotador que tenía dibujados unos lacitos. Más tarde se subió a su pequeño coche gris y se fue directa a la playa. Una vez allí extendió la toalla y se tumbó en ella. Tras eso se durmió y soñó que flotaba en una nube. Cuando se despertó decidió comer su ensalada junto con su sándwich de queso. Mucho más tarde empezó a hacer un castillo de arena, cuando lo terminó dos horas después el castillo era más grande que ella. Así que hizo una puerta se metió dentro y empezó a leer su libro favorito “El regreso al reino de la fantasía” que ya se había leído cinco veces. Pero un poco más tarde se cansó de leer, fue a coger su flotador y se tiró al agua

     - ¡que fría! -Exclamó Victoria.

     - Tardarás un poco en acostumbrarte – dijo una extraña voz.                     

¡Era su amigo Nico!

  - ¿Qué tal Nico? -Preguntó Victoria.

  - Muy bien – Contestó Nico.

  - ¿Tú también has decidido venir a la playa en un día tan soleado? – preguntó Nico.

  - ¡Claro! -Exclamó Victoria.

  - ¡Vamos a jugar! – Gritó Victoria.

 Cogieron la pelota y jugaron todo el día. Tras jugar a la pelota Nico dijo:

  - ¿Quieres un helado? –

  - Si – Contestó Victoria cansada de tanto jugar.

  - ¡Pues vamos! – Exclamó Nico.

En la heladería Victoria gritó:

 - ¡Invito yo! –

 - ¿De que quieres el helado? –

 - De fresa – Dijo Nico.

 - ¿Y tú? –

 - De chocolate – Le contestó Victoria.

La heladera les preguntó :

 - ¿Qué os apetece? –

 - Dos helados por favor, uno de chocolate y otro de fresa – Pidió Victoria.

 - Tomad, vuestros helados –

 - Muchas gracias – Le dijo educadamente Nico.

 - Mmm ¡qué rico! – Se relamió Victoria…

  Después de acabarse el helado Victoria y Nico se despidieron. Nico cogió su coche negro y Victoria su pequeño coche gris.

  Cuando Victoria llegó a casa se tumbó en su sofá a ver la tele y cuando terminó su programa favorito se preparó una leche con galletas y se lo comió todo. Victoria cansada se lavó los dientes, se echó en su cama super super alta y se quedó frita.

     ¡había terminado su gran día!